La economía social es un modelo socioeconómico de empresas de propiedad colectiva. Es un modelo en el cual la sociedad se acomoda conforme a un modelo económico que las empresas han tenido a lo largo de la historia.
La empresa es un espacio físico o virtual donde se genera valor, pero ese valor siempre proviene del trabajo y el talento de las personas, que generan algo de mayor valor y regresan esa plusvalía. En la economía social, estas empresas están en todos los sectores económicos; la propiedad es colectiva, es de las personas que hacemos las empresas.
En todas las empresas funciona igual: el paradigma principal es la propiedad de la empresa. Parecía imposible decir que hay lugares en el mundo donde las personas que trabajamos en la empresa somos los propietarios de la empresa, porque así lo dicta la economía social y el cooperativismo. También hay bancos que son propiedad de los ahorradores, empresas tecnológicas que son de propiedad social, y mutuales de salud en Europa bajo el esquema de economía social, porque los propietarios son aquellos o aquellas que hacen las empresas en todos los sectores económicos.
La economía social se basa en empresas de propiedad colectiva, que se encuentran en todos los sectores económicos.
El elemento fundamental de la economía social es la propiedad colectiva, porque la propiedad importa.
En la empresa, el propietario va a tener el beneficio económico de la propiedad, de la generación de esa empresa, de imponer la cultura y el poder de decisión. Cuando le damos estos elementos a la propiedad, significa que el propietario va a tener mejores ingresos, porque tendrá ingresos de la generación del valor de la empresa y va a tomar decisiones sobre la empresa, imponiendo o ayudando a contribuir a la cultura de la empresa. Para acercarnos a la economía social, tenemos que otorgar propiedad, decisión, ingresos y cultura a la gente que hace la empresa.