Recordemos que resiliencia no significa “sobrevivir”, “aguantar” o “dejar pasar” las grandes problemáticas de la vida, sino volver a saltar, saltar hacia un nivel superior de nuestra persona. Volver a saltar significa salir reformado, más humano, más humilde, más fuerte. Me pregunto si Mandela, Malala o Frankl hubieran logrado lo que hicieron sin haber sido sometidos a esta presión deformadora.
Si estás pasando por una situación difícil, procura mantenerte firme y piensa que puedes estar ante una oportunidad única de crecimiento. Dios no se equivoca, cuando nos somete a esas pruebas, siempre son para algo, y siempre son para bien.
Tú y yo -en la empresa, en la familia, en la vida- hemos enfrentado momentos que preferiríamos no haber vivido jamás. No los elegimos y, sin embargo, forman parte de nuestra historia personal.
ESCUCHA NUESTRO PODCAST “ENTORNO IPADE”