En el área de Dirección Financiera de IPADE, analizamos a las empresas desde la perspectiva de sus indicadores financieros, en específico su rentabilidad y liquidez, factores que de no obtenerse impiden su continuidad. Lo anterior ha sido una constante en la labor del análisis financiero. Lo que sí se ha modificado es el entorno en el cual operan las empresas.

El entorno actual es competitivo, complejo y cambiante, lo cual incrementa los desafíos para sus directivos. Basta solo resaltar la experiencia de los últimos tres años. Con relación a los temas que se abordan en las sesiones de Dirección Financiera en IPADE, quiero comentar dos temas. El primero sobre las condiciones del sector de ahorro en nuestro país.

El sector de intermediación ha mostrado notables avances, no obstante que las necesidades siguen siendo las mismas. Empresas y personas que necesitan financiar sus proyectos, por un lado, empresas y personas con ahorros que buscan maximizar sus rendimientos. La tecnología ha modificado los procesos y los patrones de comportamiento de los usuarios. Los participantes, métodos, procesos e instrumentos presentan cambios. Por lo mismo es imprescindible que los directivos identifiquen, conozcan y puedan aprovechar sus ventajas y sus riesgos.

Me encantaría establecer que en los próximos años las empresas, sectores y regiones no enfrentarán retos y riesgos relevantes. Sin embargo, no parece ser así. Por lo mismo te invito a asumir una actitud conservadora, preparando tu empresa para enfrentarte a los retos del entorno, del cliente a través del conocimiento de las herramientas, el análisis de indicadores, métricas financieras y de los casos de empresas que como tú necesitan cumplir sus objetivos en condiciones adversas para lo cual han adoptado cambios que permiten a sus modelos de negocio contar con ventajas competitivas, tanto en épocas de crecimiento como en épocas de incertidumbre.

La pandemia ha concluido, pero no sus efectos, en los próximos meses será necesario que las directoras y los directores no bajen la guardia, el análisis periódico con la finalidad de identificar áreas de mejora que permitan identificar las fortalezas, debilidades, riesgos y oportunidades del modelo de negocio será necesario para mantener la competitividad de los negocios y tener la capacidad de adaptación ante las condiciones del entorno, en un escenario que no deja de presentar retos para la alta dirección.

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